Un nuevo día, un nuevo amanecer....!

Cuando uno expresa que hoy es un nuevo día lo hace tratando de persuadir a su mente de que no importa lo que sucedió ayer por cuanto mañana será o se nos dará una nueva oportunidad. de repente ese sea el sentir de la mayoría de las personas que expresan esa frase; cabe la interrogante ¿será cierto eso?, muy probablemente sí, pero para que eso ocurra debe existir una nueva actitud en el individuo de cómo enfrentar las adversidades del día siguiente y considero que acompañado de una buena actitud no puede y no debe faltar Dios. Dios es ese nuevo día, esa nueva oportunidad, ese empuje para hacer las cosas, jamás debemos pensar que somos auto suficientes para todo, jamás pensemos que Dios es un amuleto, porque no es correcto... Dios es la esencia de vida de cualquier cristiano y por ello cada día que aparece, aparecerá con la Bendición  en nuestras vidas. Amén, amén y amén.

La paciencia del Cristiano....!

Muy buenos días a todos, Dios les Bendiga enormemente....Paciencia una palabra clave para el ser humano de hoy, una palabra que retumba en nuestros oídos, ya que estamos acostumbrados a que esa paciencia posee un limite de tiempo entre las cosas que nos pasan y hasta cuando deben pasar.
Cuando el hombre se enfrenta a la vida generalmente su paciencia se descontrola al ver que no se da solución a sus problemas, que el tiempo pasa y no existe una solución inmediata, cabe la interrogante ¿cuán pacientes somos ante la adversidad?, yo creo ser uno de los primeros en levantar la mano para decir que mi paciencia posee un limite de tiempo y ese tiempo es muy corto. Sin embargo, cuando tu vida realiza un acercamiento a Dios esa paciencia comienza a transformarse en una virtud cristiana y porque digo esto....simplemente porque cuando te acercas a Dios le pides que amolde tu vida a una vida llena de esperanza, a una vida llena de fe, a una vida llena de certeza, a una vida con una perspectiva de que las cosas poseen solución y esa solución la entrega Dios cuando aprendemos a esperar con FE. La paciencia del Cristiano no es un acto de magia, no es un acto de respuesta inmediata ya que Dios enseña a que debemos esperar con la esperanza de recibir una respuesta ante la situación de acuerdo a su voluntad; creo que Dios en su infinita Misericordia nos muestra siempre el mejor camino. En definitiva la paciencia del Cristiano se traduce en FE y Esperanza en Dios. Amén, amén y amén.