lunes, 18 de noviembre de 2013
Día de la China maracaibera....!
Hay una gaita de los Chiquinquireños muy hermosa, donde parte de su letra dice que porque otros no pueden venerar la Virgen si ellas realmente fue escogida por Dios para llevar en su vientre al Salvador del mundo....!. No pretendo discutir sobre este tema que a otros molesta; lo importante es que a mi no me molesta, por tanto yo venero a esa gran mujer, que con humildad aceptó lo que Dios Padre le dijo y por ello creo profundamente que nosotros los cristianos católicos rendimos pleitesía a la madre de Jesús Hombre, pero también Jesús hecho Dios. Por ello hoy felicito a todos aquellos que celebramos con fervor el día de la Chinita.....
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Alonso, me gustaron tus breves líneas en las que a través de una deducción lógica manifiestas tu devoción, y la de muchos otros maracuchos, incluyéndome… así que, Feliz Día de Nuestra Santa Patrona la Virgen de la Chinita.
ResponderEliminarCiertamente y con mucha frecuencia me cuestiona cada vez que escucho o leo de alguien lo dicho por la hermana Evelyn Claret (que por cierto tiene el nombre de mi santo de devoción: San Antonio María Claret): “no adoro imágenes, ningún tipo de imagen”… y es que pienso si realmente mis hermanos y hermanas con otra postura religiosa diferente a la cristiana católica logran establecer la acertada diferencia entre la ADORACIÓN y la VENERACIÓN? O si es que realizan una incorrecta hermenéutica de los textos sagrados? Porque reconozco que a primer momento cuesta establecer diferencias.
Dice el Catecismo de la Iglesia Católica:
La adoración
2096: La adoración es el primer acto de la virtud de la religión. Adorar a Dios es reconocerle como Dios, como Creador y Salvador, Señor y Dueño de todo lo que existe, como Amor infinito y misericordioso. “Adorarás al Señor tu Dios y sólo a él darás culto” (Lc 4, 8), dice Jesús citando el Deuteronomio (6, 13).
2097: Adorar a Dios es reconocer, con respeto y sumisión absolutos, la “nada de la criatura”, que sólo existe por Dios. Adorar a Dios es alabarlo, exaltarle y humillarse a sí mismo, como hace María en el Magníficat, confesando con gratitud que Él ha hecho grandes cosas y que su nombre es santo (cf Lc 1, 46-49). La adoración del Dios único libera al hombre del repliegue sobre sí mismo, de la esclavitud del pecado y de la idolatría del mundo.
http://www.vatican.va/archive/catechism_sp/p3s2c1a1_sp.html
Dentro de los estudios de teología dogmática y teología fundamental se muestran diferentes niveles o jerarquías de culto y la más alta y suprema es la ADORACIÓN que se le da ÚNICA Y EXCLUSIVAMENTE A DIOS y en grado inferior a éste está la VENERACIÓN que se le da a los Santos (como San Antonio María Claret), a la Virgen María como Madre de Dios y madre nuestra (en tanto que nosotros somos hijos de Dios y hermanos de Jesús), etc…
El Padre Linero, en la explicación del Salmo 115, logra establecer una sencilla pero muy clara diferencia entre la ADORACIÓN y la VENERACIÓN y lo comparto con ustedes: http://www.youtube.com/watch?v=GWV8zjOP15k
Nosotros, hermanos cristianos católicos y cristianos evangélicos, adoramos sólo a Dios, porque reconocemos que Él nuestro Dios, nuestro Señor, nuestro creador, nuestro salvador!!!
Una imagen sólo me hace es RECORDAR la presencia de alguien, de la misma forma como nosotros tenemos la fotografía de nuestros hijos, esposos, esposas, familiares y personas queridas, cuando estamos lejos de ellos, fotografías que a veces hasta besamos con cariño como símbolo de que queremos NO EL PAPEL, SINO LO QUE REPRESENTA ESE PAPEL… LA FUNCIÓN DE LO SIMBÓLICO ES ESO: UNIR, RELACIONAR VINCULAR, ESTRECHAR, ENLAZAR, ACERCAR… a diferencia de lo diabólico que separa, desvincula… por eso catalogamos como diabólico todo aquello que no viene de Dios, porque nos separa de Él.
Seamos pues siempre instrumentos del amor y la presencia de Dios en medio de nuestro mundo agitado y que busquemos no tanto la santidad (como un concepto elevado que a veces se nos presenta) sino más bien el ser PERSONAS, PERSONAS HUMANAS, PERSONAS REALMENTE HUMANAS, personas que promovamos valores de vida… porque en la vida, ahí está Dios: YO SOY EL CAMINO, LA VERDAD Y LA VIDA.
Feliz día para todos…
Enrique.