martes, 13 de marzo de 2012

El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán....!

Estimados amigos, feliz amanecer, que la paz del Señor se encuentre en medio de sus hijos...Hoy deseo compartir una Bendición que Dios brindó al hogar del amigo Geovanny Corona...en la mañana de ayer lunes muy temprano este amigo me llamó para notificarme que para la Gloria de Dios su cuerpo esta libre de cáncer, estimados compañeros este momento lleno mi espíritu de fortaleza y reconocimiento de ese gran poder de Jesús en la vida de todos aquellos que creemos en su Espíritu sanador...por ello que la alabanza sea dada al Dios Todo Poderoso.
La palabra de hoy habla de tres cosas importantes y las mismas conforman el titulo de este mensaje; "El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán. "; existen en el mundo muchas cosas a las cuales nosotros los hombres acostumbramos a apegarnos y sobre todo a esas materiales en las cuales sembramos esperanza, dedicación y un fin de cosas que en ocasiones pareciera que adoramos más que al propio Dios. El mismo Señor Jesús, siendo claro y preciso nos dice que todo aquello que podemos ver y tocar pasará, no existirá mas e inclusive amigos la vida, la tierra, el cielo y todo aquello que poseamos pasará de largo... quedándose solo las palabras que Jesús enseño. Es interesante pensar un momento en todo esto, por cuanto nuestro afán en la vida no esta colocado en las cosas espirituales sino en todo aquello material por las que nos esforzamos bastante. Existe algo claro, en ningún momento se pretende establecer que sea malo tener bienes y disfrutar de ellos; lo malo es el amor que se pretenda dar a esos bienes, ya que es muy conocido por nosotros la cantidad de personas que mueren injustamente por defender esos bienes materiales, donde tampoco digo que sea malo, sin embargo la vida que Dios nos ha regalado es y debe ser lo más importante y sobre todo cuando esa vida preserva la palabra de Dios guardada en ese corazón. Finalmente amigo, todo lo que aquí poseamos aquí se quedará, pensemos en ello y guardémonos para el Señor...Amén, amén y amén.

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