Cada vez que inicia un año cabe de esperar que se crea en las personas una incertidumbre inmensa de lo que ha de ocurrir en nuestras vidas, que va acontecer en nuestro andar...cómo nos ira en el trabajo, que tal con mi familia, que pasará con mi carrera...en fin una gran cantidad de incertidumbres que nos abruman y no estoy diciendo con esto que ello sea malo ni perverso, por el contrario creo que es una actitud de cualquier ser humano el pensar así. Sin embargo, por qué no pensar un poco más en Dios como dueño y Señor de nuestras vidas para que él sea quien disipe y controle todas esas incertidumbres en nuestros corazones para convertirlas en hechos concretos?, por qué Dios no se convierte en ese Ser Espiritual que llene cualquier situación incierta en nuestra vida?...Amigo(a), aún nos falta mucho que aprender como Cristianos para dejar todas esas interrogantes atrás y darle paso así a los tres elementos esenciales en la vida de un Cristiano como lo es:
La Fe, La Esperanza y El Amor...ya desde hace varios meses e insistido con esto, puesto que considero que han sido la clave para conseguir una felicidad inmensa como hijo de Dios y como persona, esposo, padre, trabajador y demás...esos tres elementos envuelven a un cristiano que desee mantener viva su fe. Como dice en Lucas 1
"...no existe nada imposible para Dios..." y si nos aferramos ante esta afirmación del Evangelista encontraremos entonces que en este inicio del año Dios debe ser el Primero y el exclusivo en quien Confiar en esta vida. Amén y amén.
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