domingo, 29 de agosto de 2010

Dios concede la victoria a sus hijos...

Generalmente nuestra vida se convierte en un andar de luchas constantes entre lo que debes hacer y lo que no debes hacer...el hombre normalmente acude y termina realizando las cosas impropias, por cuanto ellas poseen un camino más fácil para llegar a lo que el hombre desea...Jesús nos ofrece otro camino y ese camino es andar en sus promesas, siendo justos, rectos, generosos y llenos de amor por el prójimo. Cada paso de nuestra vida pudiese estar guiado por Dios, cuando nuestro corazón le pertenece a él, cuando sinceramente elevamos al cielo en oración que él nos guié y nos conceda la victoria. Pero qué es esa victoria?...suena como una lucha entre el bien y el mal o tal vez suena como si estuviésemos peleando por algo...no es eso, pero si es importante que como cristianos sepamos que constantemente nuestra lucha en esta vida es saber hacer las cosas que a Dios le agradan e allí la lucha que podríamos mantener, recordemos que somos hijos de DIOS CREADOS A SU IMAGEN pero con libertad para actuar y un cristiano debe buscar en oración a Jesús para obtener esa victoria de la que estamos hablando de manera que nuestra propia libertad no se convierta en un arma en contra de nosotros. Por ello, cuando nuestras vidas son consagradas a él obtendremos esa victoria prometida por Dios en todo nuestro andar como cristianos...la consagración amigo lector no implica que tú seas un religioso, la consagración busca que nosotros entreguemos como seres humanos una vida justa y recta en el andar con Jesús, que sepamos ayudar y amar a nuestro prójimo y vivamos de acuerdo a la voluntad Santa de Dios y allí él nos concederá la victoria como sus hijos. Amén y amén.

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